Construida en 1925, la Casa El Edén forma parte de los pocos edificios de la ciudad que reúnen todas las características representativas del estilo arquitectónico del Quito de inicios del siglo pasado: muros y cielos rasos pintados por artistas de la famosa Escuela Quiteña, maderas talladas, molduras, cenefas decorativas y otras ornamentaciones típicas de la era republicana. Puestos en evidencia durante una restauración completa, todas estas características confieren un encanto inigualable a la Casa El Edén.